jueves, 10 de septiembre de 2015

Psicóloga Sofía Carrasco ¿Quién soy?



¿Quién soy yo? Me sentiría más cómoda preguntándole a los bien aventurados que llegan a sentarse a mi sillón negro esta pregunta, pero si quiero hacer honor a mi coherencia, acá va la respuesta.

Soy una mujer en sus treinta y tantos que por diversas circunstancias de la vida, me ha tocado en esos pocos años (dijo la jovencita, jajaja) vivir muchas experiencias: duelos y pérdidas, ser mamá joven, enfrentar el cáncer, vivir en otro país, desafiar al sistema económico y alimenticio de esta sociedad, entre otras cosas más. 

Dice Jay Haley, destacado terapeuta del grupo de Palo Alto que siempre es mejor acudir a un terapeuta con "vida", o sea, que haya pasado y experimentado la vida por sí mismo, pues más allá de aplicar teorías, en un espacio terapéutico buscamos conectarnos para sanar nuestras heridas. Ahora bien, como lo plantea Séneca en su "De la brevedad de la vida", no sabe más aquel por sus canas, porque el tiempo no es el que te da la experiencia, sino que la experiencia viene a nosotros en la medida en que aceptemos el desafío de prestar atención a nuestras vidas y vivir "a concho" lo que el destino nos depara. Si llega la maternidad, seremos madres con todo lo que ello conlleva: los reproches, los abandonos, los errores, así como la capacidad de experimentar la felicidad plena, el amor incondicional, aprenderemos a aceptar con total vehemencia esta experiencia y el abanico con que interpretaremos esta vivencia será más amplio.

Mi formación como psicóloga ha estado marcada por la mirada sistémica, siendo grandes influencias en mi trabajo en clínica la escuela de Palo Alto y recientemente el enfoque centrado en soluciones. En resumen, cuando un terapeuta trabaja desde el paradigma sistémico, lo que quiere decir es que su foco de interés estará puesto no sólo en la vivencia psíquica de aquel que consulta, sino también en lo que lo rodea: pareja, familia, hijos, trabajo, escuela y en la compleja red de interacciones que se producirá entre estos micro mundos. La conexión que yo busco particularmente con una pareja, una familia o un individuo es justamente poder visibilizar el mapa completo para que una persona, familia, pareja pueda discernir dónde le es más conveniente trabajar terapéuticamente.

El modelo centrado en soluciones es una espléndida herramienta para visibilizar nuestra vida, pero sobre todo visualizar -o bien imaginar- qué queremos construir para un futuro libre de problemas y lleno de proyectos. A menudo, los problemas que la vida nos depara se hacen tan opresores que nos cuesta ver un mañana soleado. La mirada centrada en soluciones puede llevar a una persona, pareja o familiar a ver más allá de sus problemas actuales y ver la luz al final del día. Esta mirada siempre me sube el ánimo, -por esto es que cada vez me gusta más mi trabajo- porque puedo conectarme con alguien desde la compasión, libre de enjuiciamientos y compartir aquel momento en que se abren los caminos hacia las soluciones: en vez de ver depresión, vemos un camino de autoconocimento, en vez de anorexia, vemos una capacidad de autocuidado y cada uno de los involucrados va integrando salud y bienestar a sus vidas. Ese siempre es un buen día para todos.

Estudié psicología clínica en la Universidad Central de Chile. Y me he especializado en varios temas, entre ellos el psicodiagnóstico clínico en agresiones sexuales, gracias a un diplomado en la Universidad de Chile. Eso quiere decir que tengo dominio de varios test psicológicos como Rorschach, pruebas gráficas, pruebas de inteligencia como WAIS y WISC. A veces sirven y otras no, por lo que siempre converso abierta y honestamente con la gente que me consulta sobre ellos para que puedan tomar una decisión certera. Últimamente finalicé mi programa de formación en modalidad tutoría para acceder a la acreditación por parte del colegio de psicólogos de Chile. Básicamente, esto quiere decir que estudié un modelo específico de psicoterapia -el Centrado en soluciones, del paradigma sistémico- e hice terapia bajo la mirada de un psicólogo supervisor que va entregando una retroalimentación para que uno vaya mejorando su técnica.

Esa soy yo en breve, soy MUUUUUCHO más que eso, pero para que usted pueda imaginar a quién tiene en frente mientras se acomoda en mi sillón negro, ese es un comienzo.

Si quieres comunicarte conmigo, te dejo más abajo mi contacto.

Sofía Carrasco Moraga.
email: sofiadaniela21@gmail.com
wassap: 569-77069465

1 comentario:

  1. Linda! En realidad eres mucho más que eso! Muy bello relato y sorprendente, pues recelas algunas cosas que no supe de ti durante la terapia. Gracias por toda tu ayuda en este proceso que es la vida!

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